HUMBERTO YBARRA
Sevilla, 1959
Ybarra se inició con la fotografia en la década de 1990. En sus paisajes casi minimalistas, predominan las tierras de labor con los colores propios de la zona y algún elemento solitario que imprenga a sus fotografias soledad, paz y cierto misterio.
Sus obras proponen una nueva mirada sobre la naturaleza, una personal interpretación que es capaz de subjetivar con el deleite y los matices de un cuadro pintado, aquello que se captura con una cámara, cuya herramienta, donde se convocan singulares y minimalistas efectos de calma, silencio y una soledad que se aparta de lo realista para insertar ese mágico toque de ensoñación, que únicamente lo que él percibe es capaz de irradiar. Ybarra transforma así, los elementos cotidianos en escenas irrepetibles de un inevitable sabor pictórico e, incluso, cinematográfico.
No requiere más que de esos paisajes que todos hemos visto alguna vez sin detenernos demasiado en ellos. Fundamentalmente porqué el minimalismo de sus contenidos no ha alentado a otros tanto como a este sexagenario de serena mirada al horizonte. Los colores propios de éstas tierras de labor sobre suelos que evidencian su fertilidad pero que se muestran carentes de elementos que se eleven desde la superficie.
Sus obras se han mostrado en importantes revistas como Arquitectura viva o Telva.